Intimidad Sin Tabúes

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“Tu amor me deleita, tesoro mío, esposa mía. Tu amor es mejor que el vino, tu perfume, más fragante que las especias.
Tus labios son dulces como el néctar, esposa mía.     Debajo de tu lengua hay leche y miel. Tus vestidos están perfumados como los cedros del Líbano”.
(Cantares 4:10-11)

La mayoría de las personas comienzan el principal proyecto de sus vidas, el matrimonio, sin comprender plenamente el gran desafío que implica y además con conceptos muy lejanos al diseño original con que fue creado.

En la actualidad la educación y la formación de la vida sexual en los jóvenes y adolescentes tienen bases en las experiencias humanas, formación biológica, tendencias de género; pero poco conocimiento de lo que enseña La Biblia.

En el Manual de la vida, El Señor nos muestra una relación de gozo, bienestar, y felicidad que debería disfrutar la pareja en su relación de intimidad. Pero muchos por desconocimiento huyen del matrimonio cristiano. Aun en los propios hijos de Dios no rompen los esquemas, preconceptos y tabúes, que acarrean del mundo.

El Señor nos propone una relación de libertad y gozo en la relación sexual dentro de la Institución del Matrimonio. En una relación de consentimiento entre los cónyuges, sin santurronerías, ni prohibiciones. En esta unión:  cuerpo, alma y espíritu viven y disfrutan el verdadero el Amor.